En 2005 salió, con más de 50 años de retraso, una traducción francesa de Walden 2 con un prólogo mio(colgado, en francés, en este mismo blog : Avant-propos à la traduction française de Walden 2). En él, arrebatía (como de costumbre, diréis) contra el psicoanálisis y su posición dominante, hegemónica, en Francia (que he expuesto, largo y tendido, en mi articulo sobre el conductismo y el marxismo en Francia, igualmente disponible -en castellano- en este blog : Conductismo y marxismo en Francia (Skinner, Marx, la izquierda y los demás). Entre otras cosas, escribía en ese prólogo que Francia y Argentina eran al psicoanálisis lo que Cuba y Corea del Norte son al comunismo. Y un día, por pura casualidad (en realidad, satisfaciendo a mi "ego sobredimensionado" -como dirían ellos-, entrando mi nombre en Google para ver qué salía sobre mí), descubrí que, en Argentina, mi prólogo (publicado en francés), había provocado ciertas reacciones. Ahí van.